- Vuelve a Antena 3, pero como concursanta
- Pasó por todas las cadenas canarias, pero La Canaria, le hundió
Mónica González, amiga y compañera durante años (qué me cuesta hablar con equilibrio de las niñas con las que empecé en periodismo, pero lo voy a intentar) de fatigas audiovisuales estudió y pronto empezó e la radio en lanzarote hasta que un día, queda feo decir cuál, apareció en la envejecida pantalla de Tve Canarias. La niña mona de rizos rubios atrajo la mirada de todos. Menuda novedad, en una tele en donde lo más hermoso estaba en el perfil de Cristina Alcaine -imaginaos- esa secuaz de Urdaci que ahora posa con cara de mala leche en algún que otro in situ. Eran otros tiempos, los amables modos de Mo, la pusieorn no sólo al frente de los informativos locales sino que además presentó magazines varios. Se convirtió en la star, o en la Anita Obregón de la tierra. Eran otros tiempos, tiempos en los que irrumpe Antena 3 Canarias, con sobresalientes datos (superaba el 40 por ciento el noticiero tinerfeño de Victor Padrón) y hay un intento de trasladar la fórmula a Las Palmas. Aparece su padrino (luego verdugo) el gran Paquito Moreno -hombre con solera, profesional con personal definición, no es necesario que lo hagan otros, porque su ego le delata cual pollo en asadero en medio de cualquier sarao, si es de índole política, mejor que mejor-. Pues el mentado se la trae a Antena 3 como gran fichaje y ella que nunca logra el 40 si mantiene el tipo con 20 por ciento en la provincia. Hace un bue informativo a medias con el otro defenestrado, José Luis Dominguez, uno de la vieja escuela, al que también, no sé por qué, la tele canaria le valió de tumba. Eran otros tiempos. Mo recibió una lamada de Pa: "Mo, que Román quiere que me vaya a la Autonómica, me da una purria de millones y me puedo ir con mi gente, a unos los coloco en la productora y a otros, como tu, en el Ente". Pues Mo, que ya se aburría y aburría en A3 Las Palmas -siempre esperó que su buen y especial amigo Constantino Romero le abriera un hueco en San Sebastián de los Reyes, y nunca le abrió ese hueco...-no se lo pensó y se fue al Sebadal. Allí, la redacción descubrió a una tía madura, de especial atractivo, muy discreta, buen talante, pero, amiga Mo, muy gandula. Llegaba tarde, salía pronto, esas cosas de las presentaras con estrella. Presentó el Tn2 y el 1 y pasó con pena y con fobia. Apenas superó el 4 de audiencia. Los peores datos de canarias, ella que venía de ser la más de A3Canarias. Paco aflojó, perdió en un pulso magistral las riendas del invento (esa es otra Gran Canaria historia) abandonó la tele, lo abandonaron más bien. Y un enemigo que Mo había criado en la casa la llamó a despacho y le pidió reducir su sueldo a la mitad. Ella se negó y comenzó el fin. Mo salió de la tele tras un acuerdo y varios paseos por los sitios de la justicia. Nunca más se supo. De eso va años. Pero ahora me toca decir: se perdió una cara, una estrella, sin duda una de las mejores presentadoras de canarias. Hay una, es Monica y ahora está en la calle. Buena alternativa para presentar ahora de vuelta que los audimetros se han puesto en hora.
Bueno, vuelve el domingo, no se lo pierdan en A3, Cambio de rumbo, como concursanta que diría la Aído. En este reportaje Mo va a contar que ha dejado los platós de la tele a cambio de busear por el mundo. En eso me recuerda a mi amiga Silvia Lupiañez. Olé
